YO TAMBIEN SOY UNA ESTRELLA

Voy a cumplir treinta años y es exactamente el tiempo que me ha costado aceptarme a mí misma.
Hasta ahora, siempre veía fallos cuando me miraba a un espejo. Ahora los sigo viendo, pero también veo las cosas buenas. Ahora sé lo que me sienta bien, lo que me gusta, mi estilo y sobretodo lo que jamás me pondría, aunque fuera lo único disponible en las tiendas. Ahora he cambiado las sombras de ojos y el maquillaje por los sérums, las antiedad y el blush. Y aunque sigo sin apuntarme al gym, sinceramente, ya no me comparo con nadie. Me ha costado treinta años descubrir que es verdad el tópico de que cuando uno se acepta es más feliz y que nadie, créeme nadie, es perfecto.
No puedo mentirte y sí, es verdad que me encantaría medir 10 cm más y pesar 5 kg menos pero ahora, en vez de lamentarme por algo que sé que nunca va a ocurrir, uso plataformas, pantalón de pitillo o minivestido y soy capaz de enfrentarme a la mismísima Gisele. Te lo juro.
Solo necesitas creer en tí y usar las prendas adecuadas, claro, ese detalle se convierte en imprescindible. Y sobretodo haz caso a mí consejo. Menos es más.
Nunca pensé que llegaría a decir esto, pero ahora me gusto !!!
Y todo el tiempo que he perdido queriendo llegar a ser otra persona ? Lo podía haber aprovechado para hacer algo más productivo, la verdad.
Pero en mi caso, todo este cambio viene acentuado por la presencia en mi vida de alguien que me ha hecho sentir una estrella. Alguien que me ha convertido en una persona plenamente feliz. Alguien que vino a mí para descubrirme que realmente lo más importante es lo que tú sientas, es lo que tú creas y buscar tu sitio. Y sino, haz la prueba. Verás como todo el mundo te pregunta: qué te has hecho que estás tan guapa !
Yo, ya he encontrado mi lugar. Al lado del hombre que además de llevarme a conocer New York, me llevó a la luna. TQ.